La playa no es un lugar que exclusivamente podamos visitar en verano o en temporadas donde hace calor. Pensar esto es una idea equivocada que conviene desterrar lo antes posible para poder aprovecharla mejor.
El problema está en que la mayoría de los planes que se nos vienen a la cabeza están ligados a esos momentos. Y quizás no sepamos qué otras cosas podemos hacer por fuera de las épocas cálidas donde podemos meternos al agua.
A continuación, brindamos algunas posibles opciones sobre planes para aprovechar la playa en cualquier momento del año.
1. Simplemente recorrerla
Este primer plan puede resultar obvio, pero no caben dudas de que es una de las mejores opciones para hacer en la playa. Recorrer la costa y ver cómo el mar se mueve a lo lejos y termina en el horizonte es un espectáculo maravilloso.
Podemos hacerlo caminando por la arena o en un vehículo para poder abarcar distancias mayores. Lo ideal sería contar uno propio, pero si no tenemos esa suerte siempre se puede recurrir al arriendo de autos y solucionar el problema.
2. Avistaje de aves
El mar y las playas son lugares muy ricos en términos de vida animal, sobre todo en lo que se refiere a especies de aves. Si a esto le sumamos el hecho de que ver su vuelo puede ser algo magnético, el avistaje de aves es un plan ideal.
Podemos hacerlo a simple vista, sin ningún elemento, pero también podemos conseguir binoculares y hacerlo de un modo un poco más profesional. Es una actividad que podemos realizar solos, en pareja o en familia y que todos disfrutaremos.
3. Recolección de caracoles y conchas
Este plan es un clásico de cualquier playa del mundo, que además puede combinarse con los dos que mencionamos anteriormente. Podemos estar recorriendo la playa, avistando aves y juntando caracoles y conchas al mismo tiempo.
Es como una especie de búsqueda del tesoro, pero de uno mucho más importante que aquellos que tienen un valor económico, ya que se trata de rastros de vida marina. Las formas y los colores de lo que podemos encontrar vuelven este plan una actividad deslumbrante.
4. Lectura de un libro
Sabemos que los grandes lectores pueden leer en cualquier lado, sin importar demasiado el contexto. Pero la playa, sobre todo en épocas de menos movimiento turístico, es un lugar privilegiado para sumergirse en un buen libro.
Dejarse llevar por la historia que estamos leyendo al ritmo del oleaje será una experiencia de inmersión profunda. Y si, por casualidad, también tenemos la pulsión de escribir algo por nuestra cuenta, la playa también puede ser un gran lugar para hacerlo.
5. Actividad física
Terminamos esta nota con un plan que muchos llevan a cabo de manera regular como parte de sus rutinas. La playa es un lugar perfecto para ejercitarse o realizar alguna actividad física, ya que el aire salado del mar nos ayudará enormemente con la oxigenación.
Además, la suavidad de la arena hará que los ejercicios que llevemos a cabo tengan menos impacto sobre nuestro cuerpo aportando mayores beneficios. Será una gran inversión en nuestra salud.
o si no tenemos esa suerte siempre se puede recurrir al arriendo de autos y solucionar el problema.
